Serie Mundial va Washington con los Nacionales arriba 2-0
Saliendo del terreno después del último out, Juan Soto sonrió al cercarse al manager Dave Martínez e indicó dos con los dedos.
“Dos más”, le dijo Soto a Martinez.
Para entonces, el estadio Minute Maid Park en Houston estaba casi vacío y en silencio, a excepción de un pequeño grupo de aficionados detrás de la caseta de Washington.
Baste decir que se verá y oirá muy diferente el vier-nes por la noche en el Nationals Park.
A medio camino de conquistar un campeonato de Serie Mundial en una ciudad que no ha tenido una corona desde 1924, todo le salió bien a Washington al sacar una ventaja de 2-0 sobre los Astros de Houston, que eran fuertes favoritos al arrancar.
No es que nadie esperase esto.
¿Esos apretados, tensos duelos de pitcheo que se preveían con los ases Gerrit Cole, Max Scherzer, Justin Verlander y Stephen Strasburg en el montículo? No.
“Justo cuando todos pronosticamos lo que se supone que pase, este deporte te enseña que sabes quizásmenos y menos mientras más tiempo pasas”, dijo el manager de los Astros AJ Hinch.
En lugar de ello, la estrella hasta ahora ha sido un bateador _ Juan Soto, apenas en su primera campaña completa y que ya tiene una propensión a rendir a la hora buena.
Fue el hit del jardinero dominicano en el octavo inning el que encendió la remontada de los Nationals para vencer a Milwaukee en el juego de comodines en la Liga Nacional. Y entonces bateó el jonrón del empate en el decisivo quinto juego de la serie divisional contra los Dodgers.
Y parece que apenas empezaba.
Suma cuatro hits en siete turnos, con un jonrón y dos dobletes en la Serie Mundial, empujando tres carreras y anotando tres, además de robarse una base.
Y no podía ser más oportuno _ cumple 21 años el viernes, cuando Aníbal Sánchez abrirá por los Nacionales contra Zach Greinke.
Será el primer partido de Serie Mundial en Washington desde 1933, con los Senadores.
Imagínese la fiesta de amor para Soto por los fanáticos de Washington en el Nationals Park.
Difícil misión
Solo tres de los últimos 25 equipos en perder los dos juegos en casa bajo el formato 2-3-2 han remontado.
No es imposible.
Los últimos en reponerse de un mal inicio similar fueron los Yanquis en Atlanta en 1996.