Paciente con el virus muere en ambulancia tras ser rebotado de centro
Por lo menos una de las 58 muertes registradas de pacientes confirmados con el coronavirus COVID 19 en el país, está relacionada al rebote que recibió el enfermo de un centro de salud del país, produciéndose su fallecimiento dentro de la ambulancia que lo transportaba.
Esos rechazos o negativa de atención son comunes en el país y se han estado presentando y denunciando con frecuencia desde que inició la emergencia sanitaria nacional fruto de la pandemia del COVID 19.
La muerte fue informada ayer por el ministro de Salud Pública, doctor Rafael Sánchez Cárdenas, al revelar que se trabaja en la documentación de casos, que incluirán grabaciones, y en la elaboración de una resolución que regule y establezca sanciones a los centros de salud que procedan a referir pacientes sin cumplir los protocolos establecidos.
En la tradicional rueda de prensa donde da a conocer la actualización del comportamiento del COVID 19 en el país, el funcionario señaló que los rebotes se dan en clínicas y también a hospitales y que todo lo que ocurra en los centros de salud con los pacientes sospechosos de COVID 19 será documentado para que luego no haya dudas.
Los rebotes de pacientes en clínicas y hospitales, sobre todo de aquellos que llegan en condiciones delicadas o críticas, que requieren de ingresos en cuidados intensivos, son una práctica común que se da desde hace años y Listín Diario ha realizado series completas de reportajes a tratar esta problemática. En caso del COVID 19, al ser una enfermedad contagiosa, muchos centros muestran rechazo por temor a la propagación.
El doctor Sánchez Cárdenas dijo que uno de los últimos fallecimientos se produjo dentro de la ambulancia de traslado porque un centro de salud se negó la asistencia.
Dijo que la resolución que se elabora que regulará mediante un protocolo los referimientos de pacientes, contemplará sanciones definitivas tal como se hizo con los servicios de cirugías plásticas, donde se reportaban con frecuencia denuncias y casos de fallecimientos, sobre todo en manos de médicos o centros que no contaban con la habilitación de parte del Ministerio de Salud Pública.