Deporte

El Licey tiñe de azul las calles de Santo Domingo

El primer desfile de campeones por parte del Licey, en los últimos seis años, fue sencillamente apoteósico.
Un domingo tranquilo, al menos en la mañana, un día después de celebrar las festividades conmemorativas a la Virgen de la Altagracia, se convirtió en la tarde en un verdadero “mar azul”, provocado por el desfile de los hoy 23 monarcas ,Tigres del Licey.
Varios miles de personas, en motores, pasolas, carros, jeepetas y otros tipos de vehículos protegían los cuatro costados de los dos gigantes camiones que llevaban a los héroes de la ya famosa corona 23 de los Tigres, equipo que detuvo en cinco su racha sin gallardetes y nuevamente tomó el control de cetros obtenidos en la historia de la Liga.
Con cantos e insignias de que “ganamos la 23 en el año 2023 y frente al equipo serie 23” eran de las consignas del amplio grupo de parciales azules que a ritmo de una mezcla de música siguieron hasta a pie el recorrido de unos tres kilómetros de todo tipo de vehículos que se desplazaban con la lentitud de una “hormiga” por distintos sectores capitalinos.
No hubo que esperar que la caravana avanzara para que las masas liceístas fueran en grande. En cada una de las paradas los esperaban simpatizantes con banderolas en manos y con sus cornetas coreaban el famoso estribillo “Licey Campeón, Licey Campeón”. Junto a ellos, una de las canciones emblemáticas del equipo, esa que dice, “Tu lo que quieres es que coma el Tigre”, de Toño Rosario, quien incluso junto a Chiquito Team Band y Secreto tenían la responsabilidad de alegrar el ambiente en la parada en que desembocaría la caravana.
Ese desfile que salió 1 hora y  10 minutos después de lo proyectado y que la abundancia de personas en las calles lo hicieron retornar unas cuatro después de lo estimado, pues el programa original proyectaba que concluiría como a las 7:00 de la noche.
Doña Teresa Amengual, una señora de unos 75 años, exhibiendo aún sus cualidades quiso unirse al desfile y hasta con bandera azul en manos, claro acompañada de algunos familiares. “He sido una liceísta toda mi vida, desde la época en que se jugaba en la Normal y no quiero perderme esta oportunidad más de celebrar con mi equipo”, expresó al LISTÍN DIARIO.
Mientras los vehículos de diferentes modalidades bordeaban las caravanas, en las aceras jóvenes y adultos, mujeres y hombres, todos aplaudían, cantaban y vitoreaban a sus héroes, quienes entregaron alma y corazón para borrar cinco años en que no se levantaba el trofeo. Es por esto que los gritos no cesaron cuando por los frentes de los hogares pasaron los camiones en que iban Emilio Bonifacio, César Valdez, Jorge- Aquamán- Alfaro, Michael de la Cruz, Luis Barrera, Yeison Asencio, Jorge Bonifacio, Raúl Valdés, Esmil Rogers, Michael De León, entre otros pilares de los monarcas azules.
En los puentes peatonales fue notoria la aglomeración de personas y en el Francisco del Rosario Sánchez toda una congregación de personas le rindieron tributo al que muchos consideran el equipo del pueblo dominicano.
Y al parecer es así, pues la demostración de ayer es el mejor termómetro de una afición liceísta que estaba ávida de ver corona a su amado Club Atlético Licey.