Conflictos y males de salud han dejado sus marcas en 2022
Entre conflictos que crearon tensión en el sistema de salud dominicano, fruto de paralizaciones médicas, alta incidencia de enfermedades provocadas por la tridemia circulante de virus respiratorios, dengue y de otra índole y alertas epidemiológicas por viruela símica, cólera y fenómenos naturales, transcurrió el año 2022 en términos de salud.
También fue el año cuando el Gobierno dominicano puso fin a las restricciones que se mantenían desde el 2020 por la pandemia del Covid-19, incluyendo el uso de mascarillas, dejando la decisión de protección a una decisión personal.
Fenómenos naturales como el huracán Fiona que afectó mayormente las zonas este y nordeste y la coexistencia el 5 de noviembre de una vaguada y onda tropical, que provocó grandes inundaciones del Gran Santo Domingo, obligó a activar las acciones de vigilancia y respuesta rápida para evitar los brotes de enfermedades infecciosas y gastrointestinales propias de esos eventos, aunque no se generaron brotes, crearon tensiones sobre el sistema.
También, se registraron cambios en algunas gerencias del Sistema Dominicano de Seguridad Social, entre ellos la renuncia y designación de un nuevo gerente general, tras denuncias de cinco meses sin que el organismo sesionara. Poco antes de finalizar el año, también fue nombrado un nuevo superintendente de Pensiones.
Dos alertas epidemiológicas en un mes
El mes de octubre fue muy activo, obligando al Ministerio de Salud Pública a emitir dos resoluciones de alerta epidemiológica, primero por el brote de cólera detectado en Haití y luego por la alta incidencia de la influenza estacional entre la población dominicana.
La detección del primer caso de viruela símica también motivó un incremento de la alerta por viruela símica, de la cual el país registra más de 30 casos, así como el incremento en los casos de dengue, que a principios de diciembre habían superado los ocho mil infectados y 42 muertes.
El cinco de noviembre pasado, el Ministerio de Salud Pública emitió una alerta epidemiológica ante las inundaciones sufridas en el Gran Santo Domingo y en septiembre había hecho lo mismo debido al paso del huracán Fiona, que afectó mayormente el Este del país.
En el mes de febrero, el Ministerio de Salud Pública emitió alerta epidemiológica por inundaciones ante el riesgo de aumento en la morbimortalidad en las poblaciones afectadas por inundaciones en la Cordillera Central y la Línea Noroeste.
El 20 de octubre el país confirma primer caso importado de cólera tras brote en Haití, en una mujer haitiana de 32 años que llegó al país luego de permanecer por varios días en Puerto Príncipe y fue ingresada en el hospital de Higüey, provincia La Altagracia.
El seis de julio reportó el primer caso de viruela símica en un joven de 25 años de edad, de nacionalidad dominicana, que regresó al país, procedente de los Estados Unidos. Fue aislado en el Hospital Docente Doctor Ramón de Lara.
Fin a las restricciones
En el mes de febrero, cuando la incidencia de la variante ómicron aún era muy alta en la población, el gobierno dominicano anunció la eliminación de todas las restricciones contra el virus, incluyendo el uso de mascarillas, siendo uno de los primeros países en adoptar esa decisión.
La misma generó controversias, entre una parte de la población científica que veía precipitada la medida y otros que la favorecían. La población tardó unos días para asimilar la decisión, pero poco después, el uso de mascarillas quedó reservado en unos cuantos. Pese a que el año inició con resoluciones del Ministerio de Salud Pública que establecía obligatoria a partir del 31 de enero la colocación de la tercera dosis de la vacuna contra el Covid-19, plazo que después se extendió al 21 de febrero, la misma fue dejada posteriormente sin efecto en medio del desinterés de las personas por vacunarse.
Tras amplias discusiones y reuniones, se aprobó la vacunación contra Covid-19, mediante consentimiento informado de padres y tutores, de niños de cinco a 11 años, con lo que se pretendería alcanzar 1, 378,000 niños, de la farmacéutica china Sinovac.
También se abrió la posibilidad de que las personas pudieran comprar las pruebas domésticas para determinar el virus.
En los meses de noviembre y diciembre, ante el incremento en los indicadores del Covid-19, algunas personas e instituciones retomaron el uso de mascarillas en sus áreas de trabajo y las autoridades aconsejaron usarla, pero de manera voluntaria y apelando al autocuidado.
Conflictos médicos
Tomó fuerza este año, la lucha del CMD junto a organizaciones profesionales, sociales y populares, por cambios en el sistema de Seguridad Social, bajo el lema No ARS, No AFP, llevando al desarrollo de marchas, huelgas, paro de labores, llamado a desafiliación de la ARS Universal, retiro de servicios a Mapfre Salud, a nivel nacional, y a nivel regional a las ARS Monumental en la región Norte, Renacer en el Sur y ARS Simag en el Este.
Ante la imposibilidad de lograr un consenso, el Consejo Nacional de la Seguridad Social (CNSS) creó una comisión especial en busca de lograr acuerdos que pusieran fin al conflicto y llevara la tranquilidad a los afiliados del sistema.
Entre sus demandas que tiene el CMD, figuran que se cree un Plan Básico de Salud basado en todas las necesidades de salud de la gente; un modelo de salud que no sea sobre la base de los bolsillos del pueblo y tarifas por servicios prestados, unificadas e indexadas y el pago de consultas ambulatorias, entre otras.
Amplia cobertura
Durante este año, el Consejo Nacional de Seguridad Social (CNSS) emitió la resolución No. 553-02, donde dispuso la ampliación de cobertura de medicamentos y atenciones de alto costo y estableció una reducción de un 50% en los copagos que hace el afiliado del régimen contributivo, en los servicios de hospitalización, cesáreas, cirugías, trasplante renal y otras enfermedades de alto costo.
Se hizo un incremento de un millón de pesos en la cobertura de tratamiento de cáncer y otras patologías de alto costo y la cobertura de dispositivos necesarios en procedimientos mínimamente invasivos, entre otras.
Tridemia
Ante la circulación, al mismo tiempo, con alta incidencia en la población de diferentes países, entre ellos República Dominicana, de tres virus respiratorios, como el Covid-19, Influenza y Sincitial, denominado por los expertos como “tridemia”, tomó fuerza la sugerencia de expertos y autoridades de que la población retome el uso de mascarillas como medidas de protección.
Clínicas, hospitales y especialistas reportan en los últimos meses del año un incremento importante en sus consultas y emergencias de pacientes con alguna de esas patologías respiratorias o con dengue.
Subvariantes de omicron
Durante el 2022 en el país se ha mantenido la circulación de la variante ómicron y sus distintas subvariantes. En muestras que se secuencian en el Laboratorio Nacional Dr. Defilló se han detectaron por lo menos nueve de ellas como son BA.4.6, BA.5.2, BA.5.2.6, BF.7, BF.13, BN.1, BQ.1, BQ.1.1 y XBB.1.
Ruta de la salud
Durante este año el Ministerio de Salud Pública intensificó su iniciativa “La Ruta de la Salud”, con el propósito de llevar orientaciones y atenciones médicas a las provincias, partiendo de aquellas que tienen mayores indicadores de hipertensión, obesidad, sobre peso, diabetes, sedentarismo, enfermedades cardiovasculares, entre otras.
El estudio Estado Nutricional de los estudiantes beneficiarios del Programa de Alimentación escolar de República Dominicana, 2021-2022, reveló que el 31.1% de los estudiantes tiene sobrepeso-obesidad, siendo la región norte del país la más propensa y que el 45.29% de la dieta de los estudiantes es poco saludable y solo 6.9% de los estudiantes realiza la actividad física recomendada por la OMS.
Un estudio presentado en el 2021, por el Ministerio de Salud Pública (MSP) identificado como “Primera Jornada de Hipertensión Arterial: Prevención de Diabetes y Obesidad”, determinó una prevalencia de obesidad de un 33.6 % y de sobrepeso un 36.5%, lo que sumado da una prevalencia de sobrepeso y obesidad de 70.1%.