a Casa Blanca achaca las dificultades de retirar las tropas de EEUU de Afganistán a la Administración Trump
La Casa Blanca ha emitido este jueves un informe de 12 páginas en el que describe detalladamente la retirada de Estados Unidos de Afganistán y achaca las dificultades de la operación a las acciones de la Administración del expresidente Donal Trump.
«La Administración Trump saliente dejó a la Administración Biden con una fecha de retirada, pero sin plan para ejecutarlo. Y después de cuatro años de abandono, y en algunos casos degradación deliberada, los sistemas, las oficinas y las agencias necesarias para una salida segura y ordenada estaban en mal estado», reza el texto, publicado por el Consejo de Seguridad Nacional.
En este sentido, señala que, entre otras cuestiones, la Administración saliente «no proporcionó planes sobre cómo realizar la retirada o evacuar a los aliados estadounidenses y afganos». «De hecho, no había tales planes en marcha», agrega.
«El presidente Trump tuiteó, para sorpresa de los asesores militares, que el resto de las tropas de Estados Unidos deberían estar ‘en casa para Navidad’. El 28 de septiembre de 2021, el jefe del Estado Mayor Conjunto, (Mark) Milley testificó que, el 11 de noviembre, recibió una orden firmada no clasificada que ordenaba al Ejército la retirada total de Afganistán a más tardar el 15 de enero. Una semana más tarde, la orden fue rescindida y remplazada para reducir solo 2.500 soldados en la misma fecha»,
Asimismo, el texto refleja, entre otras cuestiones, que el «desprecio» de la Administración Trump hacia el compromiso con el pueblo afgano «llevó a una acumulación masiva de 18.000 solicitudes de visados», según ha informado la cadena NBC News.
Los talibán lograron recuperar el poder en agosto de 2021 tras la huida del país del entonces mandatario, Ashraf Ghani, en medio de sus avances militares hacia la capital, Kabul, en medio de la retirada de las tropas internacionales pactada entre Estados Unidos y los insurgentes en un histórico acuerdo de paz firmado en febrero de 2020 en la capital de Qatar, Doha.