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Hemocentro suplirá la sangre de manera gratuita

Sólo el 20% de la sangre que se colecta en el país proviene de donación voluntaria, lo que explica el drama que vive la población al momento de requerir sangre entera, plaquetas, plasma y otros hemoderivados para atender una necesidad médica.

Ese porcentaje, de acuerdo a autoridades nacionales, empezará a revertirse hasta alcanzar un 100 por ciento de donación voluntaria cuando entre en funcionamiento el Hemocentro Nacional y la Red Nacional de Sangre, cuyas instalaciones, ubicadas en la Ciudad de la Salud, fueron entregadas ayer de manera formal por la Vicepresidencia de la República al Ministerio de Salud Pública, que tendrá a cargo su rectoría.

Se espera que el Hemocentro Nacional empiece a funcionar de manera gradual a partir de finales de noviembre próximo, de acuerdo a su director, doctor Sócrates Sosa, y en tres años estaría funcionando a toda capacidad, por lo que la población no tendrá que salir personalmente en busca de sangre ni de donantes como ocurre actualmente, sino que la solicitud la hará directamente el centro de salud involucrado.

El Hemocentro Nacional que es el organismo oficial que suplirá la sangre y sus derivados a la población de manera gratuita y mediante la cobertura de las ARS, y le llegará a través de los centros de salud, por lo que las personas no tienen que ir a buscarla.

El centro, con capacidad para procesar 400 pruebas en una hora y atender 10 donantes de manera simultánea, tiene la función de captar, procesar y distribuir la sangre que necesitan los pacientes para transfusión. El local está ubicado en la sede de la Ciudad de la Salud, en la avenida Charles de Gaulle.

El acto de entrega formal fue encabezado por la vicepresidenta Margarita Cedeño y el ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cárdenas, y contó con la presencia de representantes de instituciones nacionales y organismos internacionales.

Su funcionamiento se hará a través de una Red Nacional de 16 bancos de sangre ubicados en diferentes hospitales, iniciando con los hospitales Taiwán en Azua, Jaime Mota en Barahona, José María Cabral de Santiago, San Vicente de Paúl de San Francisco de Macorís, y la Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia en Santo Domingo.